Con más de 1,5 millones de consultas respiratorias proyectadas este invierno en Chile y un aumento en las hospitalizaciones de niños, la prevención ya no es una opción: es una urgencia. Fortalecer el sistema inmune con buenos hábitos, nutrición inteligente y micronutrientes como la vitamina C liposomal puede marcar la diferencia entre resistir o caer.
ABRIL, 2025.- Las alarmas por las enfermedades respiratorias están activadas, los casos van al alza y se estima que el peak ocurra en mayo. Según estimaciones del Ministerio de Salud, se espera que este invierno los virus respiratorios puedan generar más de 1,5 millones de consultas médicas y aumentar en más de un 50% las hospitalizaciones pediátricas en comparación con años anteriores. Un escenario que ya comienza a tensionar la red asistencial y que podría agravarse en las próximas semanas.
Frente a este escenario, la prevención es un asunto perentorio. Y junto con las mascarillas, vacunas y el lavado frecuente de manos, hay que recordar que el verdadero escudo está en el sistema inmune y en cómo lo preparamos para el invierno desde el punto de vista nutricional y de salud general.
“La mayoría de las personas reacciona cuando ya está enferma, pero lo que realmente puede marcar la diferencia es cómo llegamos al invierno: si llegamos fuertes, tenemos menos posibilidades de enfermarnos o de que la enfermedad se agrave”, advierte Pedro Grez, auto del Método Grez y creador de la línea de suplementos etiqueta limpia que lleva su nombre.
Hábitos que fortalecen las defensas
El experto en bienestar destaca que el sistema inmune es nuestra primera línea de defensa frente a virus y bacterias. Y agrega que “por eso, cuidarlo no debería ser una reacción de último minuto, sino una estrategia preventiva que combine buenos hábitos con una nutrición inteligente”.
Comenta que dormir bien (idealmente 7 a 9 horas diarias), mantener una rutina de actividad física, manejar el estrés y evitar el exceso de alcohol o tabaco son pilares básicos para mantener un sistema inmune activo y eficiente.
Pero cuando el entorno nos expone a más riesgos —como ocurre en otoño e invierno—, muchas veces estos hábitos no son suficientes. Aquí es donde los micronutrientes pueden jugar un rol decisivo.
“Los suplementos no reemplazan una alimentación saludable, pero pueden marcar la diferencia cuando los requerimientos son más altos o cuando la dieta no logra cubrirlos. Hoy sabemos que llegar bien nutrido al invierno es tan importante como lavarse las manos o ventilar los espacios”, señala Grez.
Estos son algunos de los nutrientes más respaldados por la ciencia para el soporte inmunológico:
– Vitamina C liposomal: A diferencia del ácido ascórbico tradicional, el formato liposomal permite una absorción superior y una permanencia más prolongada en el cuerpo. Esto potencia su acción antioxidante y su rol en el funcionamiento de los glóbulos blancos durante infecciones respiratorias. En este caso, Grez advierte que es importante chequear las etiquetas antes de comprar, las formulaciones liposomales deben tener un solo ingrediente: vitamina C liposomal.
– Vitamina D3 liposomal: Fundamental para activar las defensas del cuerpo, especialmente en épocas de poca exposición solar. Los niveles bajos de esta vitamina se asocian con mayor riesgo de infecciones respiratorias. Igual que con la vitamina C liposomal es fundamental revisar las etiquetas y confirmar que sea un solo ingrediente.
– Zinc: Ayuda a reducir la duración y severidad del resfriado común. Es clave para que las células inmunes trabajen correctamente.
– Selenio y cobre: Cofactores de enzimas antioxidantes que ayudan a reducir el daño celular durante los procesos inflamatorios.
– Probióticos: Promueven el equilibrio de la microbiota intestinal, un componente esencial de la inmunidad; prefiere los que contienen Bacillus coagulans e incluyen también prebióticos, el alimento de los probióticos.
¿Cuándo empezar? La respuesta: ¡Ahora!
Uno de los errores más comunes es esperar a enfermarse para tomar cartas en el asunto y tratar los síntomas. En general la prevención no es parte de la estrategia familiar. Pero hay que tomar en cuenta que los suplementos no funcionan de forma inmediata: requieren tiempo para alcanzar niveles óptimos en el cuerpo y generar un impacto real. “Es fundamental empezar antes de que llegue el peak. No esperes a que todos a tu alrededor estén con fiebre o congestión para ocuparte”, recomienda Grez.
Además, hay que recordar que mantenerse bien hidratado, ventilar los espacios cerrados, evitar cambios bruscos de temperatura y lavarse las manos con frecuencia siguen siendo medidas esenciales.
Si bien no podemos evitar del todo la exposición a virus y bacterias en esta época del año, sí podemos llegar mejor preparados. Un sistema inmune fuerte no solo reduce el riesgo de enfermarse, sino que también permite enfrentar mejor la infección si ocurre. Y cuanto antes se empiece, mayores serán los beneficios.
SOBRE GREZ
La marca irrumpió en el mercado nacional como la primera línea de suplementos de etiqueta limpia en agosto de 2022. Actualmente está compuesta por 16 suplementos que apuntan a mejorar la calidad de vida y el funcionamiento del organismo. Su valor agregado es que sus productos no contienen excipientes ni ingredientes rellenos, entregan 100% vitaminas o minerales al organismo. Se trata de un emprendimiento familiar, oriundo de la Región de Los Ríos, que el año pasado ingresó a Amazon USA y creó su propia tienda online en Estados Unidos. Durante el 2024, también fue reconocido como la “Mejor Marca de Suplementos de Etiqueta Limpia en Sudamérica”, premio entregado por la prestigiosa revista británica LUXLife.
Equipo Prensa Portal Red Salud
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