- La EVC alcanza una prevalencia cercana al 80 % de la población, y se desarrolla a lo largo de seis estadios clínicos, siendo el C2 el más frecuente, caracterizado por la presencia visible de várices, las cuales pueden ser solo un asunto estético o evolucionar hacia complicaciones como la úlcera venosa (1).
Santiago de Chile, diciembre de 2025.- La enfermedad venosa crónica, también conocida como insuficiencia venosa crónica (IVC), es una condición en la que las venas de las extremidades inferiores pierden su capacidad de retornar la sangre de forma eficiente al corazón. En Chile, esta condición afecta aproximadamente a entre el 20 % y el 30 % de la población adulta, cifra que puede superar el 50 % en personas mayores de 50 años. Sus manifestaciones incluyen dolor, sensación de pesadez, edema y, en estadios más avanzados, la aparición de úlceras venosas, impactando de manera directa tanto la salud física como el bienestar emocional de quienes la padecen.
Signos como la visibilidad de venas, la fatiga en las piernas, los calambres nocturnos o el hormigueo persistente deterioran significativamente la calidad de vida. A esto se suma que, en muchos casos, el estigma social retrasa la consulta médica y el inicio oportuno del tratamiento. La incidencia de la IVC comienza a aumentar desde edades tempranas, a partir de los 20 años, y se presenta con mayor frecuencia en mujeres, lo que refuerza la importancia del diagnóstico precoz.
En este escenario, la marca JOBST, referente mundial en medias de compresión, presenta una nueva fase de su campaña global con un mensaje contundente: llegó el momento de derribar los prejuicios en torno a las enfermedades venosas y transformar la manera en que las personas conviven con ellas. Bajo el concepto “Nada te detiene”, la iniciativa pone en el centro historias reales de pacientes que demuestran que es posible mantener una vida activa, plena y sin restricciones, aun conviviendo con una condición venosa.
¿En qué consiste la terapia compresiva y cuáles son sus beneficios?
La terapia compresiva es un abordaje que utiliza medias especiales para ejercer una presión graduada sobre las piernas, mayor en el tobillo y menor hacia la parte superior. Este mecanismo favorece el retorno venoso, disminuye la acumulación de sangre en las extremidades inferiores y contribuye al mejor funcionamiento de las venas dilatadas.
La IVC representa un desafío relevante para la salud pública en Chile. No obstante, cuando existe evaluación médica oportuna y un plan de tratamiento individualizado, es posible reducir síntomas, evitar complicaciones y mejorar de forma notable la salud vascular. Dentro de las alternativas terapéuticas disponibles, las medias de compresión destacan como una herramienta eficaz, accesible y de amplio respaldo clínico.
Un abordaje integral de la enfermedad
El manejo de la insuficiencia venosa crónica contempla tanto estrategias conservadoras como procedimientos invasivos, dependiendo del estadio clínico del paciente. Entre las opciones no invasivas se encuentran el ejercicio físico, la terapia compresiva y el tratamiento farmacológico. En los casos que lo requieren, pueden indicarse intervenciones como cirugía de venas superficiales y profundas, flebectomías percutáneas o técnicas de stripping para la corrección de várices.
En particular, la terapia compresiva contribuye a aliviar molestias como cansancio, pesadez, sensación de quemazón e hinchazón en las piernas. Además, se recomienda en distintas situaciones: prevención del edema asociado a trabajos con largas jornadas de pie o sentado, reducción del riesgo de trombosis venosa durante vuelos prolongados, periodos de hospitalización, embarazo, manejo del linfedema y lipedema, así como en la prevención de recaídas de úlceras venosas y del síndrome postrombótico.
“Desarrollamos soluciones de compresión que permiten a las personas retomar el control de su bienestar frente a las enfermedades venosas. Somos conscientes de que aún existen barreras culturales y creencias erróneas sobre su uso, por eso trabajamos continuamente en educación, prevención y diagnóstico oportuno. Queremos transformar la percepción de estas condiciones. Con JOBST demostramos que es posible vivir de manera plena, aun con insuficiencia venosa crónica”, señaló Javier Pizarro, director comercial de la marca en Chile.
La insuficiencia venosa crónica es una condición con un efecto profundo en la calidad de vida de la población chilena. Sin embargo, con atención médica oportuna y un tratamiento ajustado a cada paciente, es posible controlar los síntomas, disminuir el riesgo de complicaciones y avanzar hacia una mejor salud vascular.
Referencias:
- De Maeseneer MG et al., European Society for Vascular Surgery (ESVS) 2022 Clinical Practice Guidelines on the Management of Chronic Venous Disease of the Lower Limbs, European Journal of Vascular and Endovascular Surgery.
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Essity es una compañía global líder en higiene y salud. Cada día, mil millones de personas, en todo el mundo, utilizan nuestros productos, servicios y soluciones. Nuestro propósito es romper barreras por el bienestar en beneficio de consumidores, pacientes, cuidadores, clientes y la sociedad en general. Vendemos en aproximadamente 150 países bajo las principales marcas globales TENA y Tork, así como otras marcas como Actimove, Cutimed, JOBST, No-Varix, Knix, Leukoplast, Libero, Libresse, Lotus, Modibodi, Nosotras, Saba, Tempo, TOM Organic y Zewa. En 2024, Essity tuvo ventas de aproximadamente 13 mil millones de euros y empleó a 36,000 personas. La sede de la compañía está ubicada en Estocolmo, Suecia, y Essity cotiza en Nasdaq Estocolmo. Más información en www.essity.com.
