Daniela Astudillo, Académica Carrera de Nutrición y Dietética UDLA Sede Viña del Mar
Las celebraciones de Fiestas Patrias se caracterizan por las reuniones al aire libre y el consumo de preparaciones típicas como empanadas, asados, anticuchos, choripanes, ensalada a la chilena y pebre, entre otras. Esto, sumado al alza de las temperaturas por la cercanía de la primavera, aumentan la probabilidad de intoxicaciones, lo que hace necesario reforzar los cuidados en la manipulación, preparación, consumo y conservación de los alimentos.
Un primer aspecto esencial es la higiene. El correcto lavado de manos antes de cocinar, después de ir al baño o de tocar superficies potencialmente contaminadas, reduce significativamente el riesgo de transmitir bacterias como Escherichia coli o Staphylococcus aureus, además de virus y parásitos.
Otro punto crítico es evitar la contaminación cruzada. Para ello se recomienda separar alimentos crudos y cocidos, emplear distintos utensilios para cada tipo de preparación y desinfectar cuidadosamente tablas, cuchillos y mesones tras cada uso.
El control de la temperatura es igualmente relevante. Los alimentos deben mantenerse refrigerados entre 0 °C y 5 °C, no expuestos a temperatura ambiente por mucho tiempo. Aquellos que se cocinen, tienen que alcanzar al menos 65 °C antes de servirse. También se sugiere no recalentar las comidas más de una vez y evitar volver a congelar productos ya descongelados.
En el caso de las fondas o celebraciones masivas, se debe privilegiar el consumo en locales con resolución sanitaria, verificando tanto la procedencia de los productos como las condiciones de higiene durante su preparación.
Prevenir intoxicaciones alimentarias durante las Fiestas Patrias permite disfrutar de manera segura, evitando riesgos innecesarios para la salud.