Si bien existen una serie de creencias arraigadas en las personas en torno a la visión y salud ocular, muchas de ellas son falsas. Desde Clínica Oftalmológica Providencia destacan 10 de los mitos más habituales que se mantienen hasta hoy.
Mito 1: Ver muy cerca televisión o pantallas de dispositivos electrónicos como computadores o teléfonos celulares daña permanentemente la visión.
El Doctor Eusebio García, Director Médico de COP, indica si bien ello puede producir ojo seco, generar fatiga ocular o dolor de cabeza durante un cierto tiempo, no se deteriora la capacidad visual.
Mito 2: Los ejercicios oculares mejoran la visión.
Lo anterior no tiene una demostración científica; los problemas de salud ocular responden a distintas causas y no se resuelven con gimnasia visual. Lo único que esta sí puede mejorar es el cansancio visual y la insuficiencia de convergencia, consistente en que los ojos no enfocan simultáneamente un objeto cercano.
Mito 3: Jugar a ponerse turnio es peligroso porque los ojos pueden quedarse así para siempre.
El oftalmólogo Eusebio García explica que los ojos bizcos pueden tener como causa una enfermedad visual no tratada, pero no el moverlos en determinadas direcciones. De hecho, a veces es recomendable.
Mito 4: Leer con poca luz provoca enfermedades en los ojos.
Aunque lo anterior puede causar cansancio visual y, según la edad, hacer necesario el uso de anteojos para ver de cerca, una escasa iluminación no deriva en una patología ocular.
Mito 5: Comer zanahorias mejora la vista.
Si bien este tubérculo es rico en vitamina A y una buena alimentación aporta a la salud ocular, no mejora problemas visuales cuando estos se presentan, pues en su mayoría son fisiológicos.
Mito 6: Frotar un anillo de oro y ponerlo sobre un orzuelo ayuda a eliminarlo.
Aunque es cierto que aplicar calor en la zona cercana al orzuelo puede ser de ayuda, es falso que poner un anillo de sobre él sea la solución. El calor local con agua hervida es muy recomendable, el oro es buen difusor de calor, pero una argolla no limpia las bacterias y su tamaño es muy pequeño.
Mito 7: La manzanilla cura los ojos irritados.
Mas allá de que se reconoce que esta planta tiene propiedades antiinflamatorias, no es la solución recomendable para este problema. El Doctor Eusebio García comenta que las infusiones, como manzanilla o té no son dañinas, ya que son realizadas con agua hervida, pero aclara que es el calor el que ayuda, no las yerbas.
Mito 8: Leer letras muy pequeñas daña los ojos.
También se trata de una creencia falsa. Lo anterior solo puede producir cansancio visual, pero no un deterioro de la capacidad visual. Si las letras son demasiado pequeñas, será necesario usar lentes tipo lupa para leerlas, incluso a una edad precoz.
Mito 9: Usamos gafas cuando nuestros ojos tienen una patología.
Las personas que usan lentes no es porque sus ojos estén enfermos, sino que para corregir una variación en la anatomía de estos, que dificulta enfocar bien. Es conveniente utilizar gafas con protección solar.
Mito 10: Solo se debe consultar al oftalmólogo de manera reactiva, cuando se presenta un problema.
Así como se observa en otras especialidades médicas, es importante acudir a un experto en salud ocular de manera periódica, idealmente cada seis meses para prevenir patologías a largo plazo y, de ser detectada alguna, poder reaccionar oportunamente para su tratamiento. Este control es especialmente necesario si hay enfermedades familiares, si se lee o conduce mucho, si se está expuesto en exceso a pantallas o si se padece diabetes o hipertensión.
Equipo Prensa Portal Red Salud