La incidencia del cáncer es mayor en hombres que en mujeres, y la edad es el factor de riesgo más importante. Otros factores que aumentan el riesgo de cáncer son el tabaco, el alcohol, la obesidad y el sedentarismo. El tabaco es el responsable del 30% de los casos de cáncer y del 82% del cáncer de pulmón.
Según la Academia Americana de Cáncer, en Estados Unidos, aproximadamente uno de cada dos hombres y una de cada tres mujeres recibirán un diagnóstico de cáncer en algún momento de sus vidas, lo que resalta la importancia de implementar estrategias de prevención y control. Asimismo, 1 de cada 5 hombres y 1 de cada 6 mujeres podría morir de cáncer.
“Es fundamental implementar estrategias de prevención primaria y secundaria, especialmente en países de ingresos bajos y medios, donde las disparidades en el acceso a la detección temprana y tratamientos son más pronunciadas”, explicó Matías Cortés, doctor de Mediko.
Aunque la edad es el factor de riesgo más significativo, otros elementos como el consumo de tabaco y alcohol, la obesidad y la inactividad física también contribuyen de manera considerable al desarrollo de esta enfermedad. “Fomentar estilos de vida saludables, como la actividad física regular y una dieta equilibrada, es crucial para combatir la obesidad, un factor de riesgo conocido para más de 12 tipos de cáncer”, añadió el experto.
A nivel mundial, en 2024 se proyecta que se diagnosticarán más de 2 millones de nuevos casos de cáncer, y 9,7 millones de personas perderán la vida por esta enfermedad tras un análisis de la Revista Médica de Chile. El cáncer de mama, pulmón y colorrectal lideran las estadísticas, con un impacto que varía según el género. En los hombres, los tumores más comunes son los de próstata, pulmón y colorrectal, mientras que en las mujeres, el cáncer de mama es predominante, seguido de los de pulmón y colorrectal.
“El acceso a la detección temprana puede marcar la diferencia. Identificar el cáncer en etapas iniciales mejora significativamente las tasas de supervivencia y la calidad de vida de los pacientes. En el caso del cáncer de mama, por ejemplo, la detección precoz a través de mamografías ha demostrado reducir la mortalidad”, comentó Cortés.
El tabaco, en particular, se mantiene como el responsable del 30% de los casos de cáncer y del 82% de los diagnósticos de cáncer de pulmón, siendo este último uno de los más letales a nivel mundial. Estas cifras subrayan la importancia de continuar promoviendo políticas de control del tabaco y campañas de concientización para reducir su consumo. A pesar de los avances en tratamientos y diagnósticos, las tasas de mortalidad por cáncer de pulmón siguen siendo altas, sobre todo en los hombres.
“Las políticas de control del tabaco, como el aumento de impuestos sobre los productos de tabaco, han demostrado ser altamente efectivas y costo-efectivas en la reducción de la incidencia de cáncer relacionado con el tabaquismo”, subrayó Matías de Mediko.
Las tasas de incidencia y mortalidad del cáncer reflejan las desigualdades existentes entre regiones y grupos poblacionales. Países con mayores niveles de esperanza de vida y estándares de vida altos tienden a tener tasas más elevadas de cáncer en general, mientras que en naciones con menores niveles de desarrollo, ciertos tipos de cáncer, como el de cuello uterino, tienen una prevalencia más alta. Estas diferencias evidencian la necesidad de intervenciones adaptadas a cada contexto social y económico.
Equipo Prensa Portal Red Salud