Fonasa implementará Bono PAD para cirugía bariátrica:
Especialistas hacen llamado a contar con asesoramiento multidisciplinario para evitar efectos adversos
La cirugía bariátrica se ha consolidado como una creciente alternativa de cambio de vida para pacientes con obesidad. Por ello, es fundamental poner atención a los cuidados que requiere este tipo de intervención, tales como la importancia de un postoperatorio acompañado por un equipo multidisciplinario altamente calificado, a fin de evitar efectos adversos a causa de la cirugía bariátrica, tales como lo es el síndrome de dumping.
Santiago, 24 de Febrero de 2022.- Desde marzo, los pacientes mayores de 18 años que requieran una cirugía bariátrica, podrán optar a realizarla a través del sistema PAD de Fonasa, sumando esta intervención a otros 63 diagnósticos cubiertos por este sistema, que incluye procedimientos médicos y quirúrgicos, días de cama, medicamentos e insumos médicos, en un momento en que Chile ocupa el cuarto lugar de obesidad a nivel mundial con un 31% de prevalencia, sólo por debajo de Estados Unidos (38%), México (32%) y Nueva Zelanda (31%).
El especialista en cirugía bariátrica y digestiva de Nueva Clínica Cordillera, Dr. Carlos Quevedo, explicó que los resultados de este tipo de tratamiento quirúrgico de la obesidad se relacionan con “el nivel de entrenamiento del equipo quirúrgico, la adecuada técnica quirúrgica según cada requerimiento y a una eficiente coordinación del equipo multidisciplinario”. Lo anterior, dado que esta intervención y su éxito requieren del trabajo en conjunto de cirujanos, médicos clínicos, psiquiatras, nutricionistas, psicólogos y entrenadores físicos, quienes, en sus distintas áreas, realizarán un seguimiento del paciente, su avance y respuesta al tratamiento.
SÍNDROME DE DUMPING:
El profesional sostuvo que si bien la cirugía garantiza un resultado exitoso y efectivo a largo plazo, en este proceso también se pueden experimentar efectos adversos como el síndrome de dumping, que según Quevedo “tiene lugar cuando se genera una modificación del tubo digestivo y los alimentos pasan con mayor velocidad por el estómago al intestino, sin pasar por el duodeno” y detalla que esta situación “produce varios síntomas gastrointestinales, tales como diarrea, náuseas, vómitos y dolor abdominal. También viene acompañados por taquicardia, sudoración, sensación de debilidad, hipoglucemia o una bajada de la presión arterial”.
El especialista también detalló que existen dos formas de experimentarlo, según el momento en que aparecen los síntomas: síndrome de dumping precoz y el tardío. “El dumping precoz, puede ocurrir entre 15 a 20 minutos después de comer. Mientras que el tardío, el sucede entre 2 a 3 horas más tarde; y su duración puede llegar a un año, remitiendo los síntomas en la mayoría de los casos de forma gradual y espontánea. El más frecuente es el dumping precoz”.
Los síntomas varían dependiendo de qué tipo de dumping es presentado en el paciente y el Dr. Carlos Quevedo de Nueva Clínica Cordillera afirmó que, en el síndrome de dumping precoz, se puede experimentar síntomas, tales como hinchazón abdominal, náuseas, vómitos y calambres; hipotensión, taquicardia, sudoración fría; fatiga, enrojecimiento o palidez; dolor de cabeza, mareos y posible pérdida súbita y breve de la conciencia. “Mientras que la sintomatología al sufrir síndrome de dumping tardío se centra en la debilidad, sudoración y malestar en general; disminución de la concentración; niveles alterados de la conciencia y mareos intensos; hipoglucemia”, puntualiza.
EL ROL DEL EQUIPO MULTIDISCIPLINARIO TRAS LA OPERACIÓN:
El profesional de Nueva Clínica Cordillera es enfático en señalar que, tras una cirugía de esta naturaleza, es fundamental que se brinde al paciente una red de apoyo especializada e integrada por profesionales tales cómo kinesiólogos, psicólogos y nutricionistas, a fin de entregar un monitoreo constante y completo que facilite y asegure una adaptación del mejor modo posible a su nueva forma de vida.
Pese a los inconvenientes que se pueden presentar luego de este tipo de cirugías, el profesional hace un llamado a no tenerle miedo a la cirugía, dado que está puede cambiar significativamente la calidad de vida de las personas, además explica casos como “el síndrome de dumping, son prevenibles con una alimentación sana, evitando el consumo de azúcar y alimentos procesados, o no beber durante las comidas, puesto que los líquidos deben ingerirse entre 30 y 60 minutos antes o después”.
Para el especialista, la cirugía bariátrica ofrece importantes avances en la calidad de vida de pacientes que sufren de sobrepeso y que no han tenido mejoría con sistemas de dieta ni ejercicios, siempre y cuando se cuente con los profesionales indicados. Al respecto, la psicóloga de Nueva Clínica Cordillera, Patricia Canales, concuerda con que debe existir esta red de apoyo, dado que advierte que un 59% de pacientes sufriría algún tipo de trastorno psiquiátrico luego de una intervención cómo está, siendo los más frecuentes los trastornos de personalidad en un 36% con alteraciones de ánimo y estabilidad emocional.
Por otra parte, también afirmó que “un 19% podría padecer trastornos de ansiedad, sentimientos depresivos, irritabilidad y ciertos conflictos que se generan a nivel relacional, tanto con parejas y familiares, debido en mayor parte por la ingesta de alimentos por parte del paciente”, por lo que a terapia, pre y post cirugía, será fundamental y determinante, pues afirma que “es necesario saber que es un proceso y requiere de tiempo, no es una receta mágica. Además de tener extremadamente claro que requerirá de esfuerzo, perseverancia y cambios de hábitos”.
Canales finalizó destacando que “El paciente tendrá que ser responsable, saber que deberá asistir en forma regular a sesiones con los diferentes profesionales a cargo del proceso y poner todo de su parte para lograr su objetivo. Así también ocuparse en cuanto a rutinas de deporte que son imprescindibles para optimizar la disminución progresiva de peso”.
Equipo Prensa Portal Red Salud