La leche y los productos lácteos son una valiosa fuente de nutrientes esenciales, tales como proteínas de alta calidad, calcio, vitamina D y vitamina B12, que desempeñan un papel fundamental en el desarrollo y mantenimiento óptimo del organismo. La nutricionista de Nueva Clínica Cordillera, Camila Sembler, puntualiza en la necesidad de mantener una dieta equilibrada, donde la leche sea un alimento protagonista.
Santiago, 29 de mayo de 2023.- La Organización Mundial de la Salud, OMS, recomienda consumir al menos 3 veces al día productos lácteos. Un informe de las universidades de La Frontera (UFRO), Católica del Norte y San Sebastián reveló que sólo un tercio de las personas entrevistadas, a lo largo del país, está ingiriendo estas dosis recomendadas. El mismo informe indicó que el queso es el más consumido por los chilenos.
Una preocupante realidad debido a las valiosas propiedades nutricionales de la leche y sus productos derivados, los cuales son fundamentales para un crecimiento y desarrollo adecuados. Al respecto, la profesional en nutrición de Nueva Clínica Cordillera explicó que un consumo deficiente de leche puede acarrear consecuencias para la salud.
“La deficiencia de calcio puede aumentar el riesgo de osteoporosis y fracturas óseas, especialmente en etapas de la vida como la infancia, adolescencia y la tercera edad. Además, la falta de proteínas de alta calidad puede afectar el crecimiento muscular y la recuperación de lesiones”, puntualizó Camila Sembler.
Es sabido el potencial de la leche y sus propiedades, pero pese a ello aún la consumimos poco, precisó el profesional de Nueva Clínica Cordillera, donde destaca que «la leche es una fuente valiosa de proteínas de alta calidad, necesarias para el crecimiento y reparación de tejidos, así como para el mantenimiento de una masa muscular adecuada.
Frente a esto, la nutricionista destacó que es fundamental que las familias comprendan la importancia de incluir la leche y los productos lácteos en su alimentación diaria. «Se sugiere consumir al menos tres porciones de lácteos al día, como leche, yogur o queso, para asegurar una ingesta adecuada de estos nutrientes esenciales», añadió Sembler.
A esto, se le suma el aporte de ácido graso linoleico conjugado, también conocido como CLA, enzima que se ha corroborado tiene propiedades anticancerígenas y protector del sistema cardíaco, de acuerdo a información proporcionada por el Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA).
¿Cómo aumentar el consumo?
La cantidad de leche que se debe consumir varía según una multiplicidad de factores. Camila Sembler, nutricionista de Nueva Clínica Cordillera enfatiza que es importante considerar la edad, el sexo, el estado de salud y las necesidades individuales de las personas.
Si bien existen normas generales de consumo y datos a nivel global, es fundamental tener en cuenta que cada individuo es único. «En la mayoría de los adultos, se sugiere consumir alrededor de 2 a 3 porciones de lácteos al día. Una porción equivale a una taza (240 ml) de leche, pudiendo distribuirse a lo largo del día e incluir otros productos lácteos como yogur o queso», aclara la nutricionista.
La especialista también enfatiza que las necesidades de calcio pueden variar según la etapa de la vida. «Por ejemplo, los adolescentes en crecimiento y las mujeres embarazadas o en período de lactancia pueden requerir una mayor ingesta de calcio. En estos casos, se recomienda siempre consultar a un especialista en nutrición y a un profesional de la salud para obtener una asesoría específica».
Además, es fundamental seleccionar opciones lácteas saludables. Optar por leche descremada o semidescremada puede ser una buena elección para reducir la ingesta de grasas saturadas. Asimismo, es importante evitar el consumo excesivo de productos lácteos con azúcares añadidos, como ciertos yogures endulzados o batidos comerciales.
Equipo Prensa Portal Red Salud