Por: Jessica Arancibia, senior manager de Minsait Business Consulting
Nuestro mundo se encuentra en un constante cambio, desde lo natural, hasta lo social. Y es en este último punto en donde nos afecta de manera primaria como seres humanos, impactando en nuestro actuar y pensar.
Bajo esta perspectiva nace la neuroestrategia, una disciplina que combina los campos de la neurociencia y la estrategia para comprender cómo los procesos cerebrales y cognitivos influyen en la formulación y ejecución de estrategias. Basándose en la idea de que el conocimiento sobre el funcionamiento del cerebro, puede aportar nuevas perspectivas y enfoques para mejorar la toma de decisiones estratégicas.
En el ámbito de las organizaciones, a pesar de los esfuerzos que las empresas hacen para entender a sus clientes, éstos habitualmente no son suficientes para lograr los resultados esperados, diversos estudios como IESE Business School, han demostrado que la tasa de fracaso en el lanzamiento de nuevos productos alcanza el 90% en algunos sectores.
Mientras que para identificar qué influye en la actitud y comportamiento de los clientes, Harvard Business Review, ha comentado que las empresas se basan en encuestas y focus groups, los cuales se fundamentan en los recuerdos de los clientes, que se deterioran rápidamente y están sesgados, por ejemplo por el contexto.
La neuroestrategia en el negocio
Considerando que el 95% de las decisiones que tomamos lo hacemos a nivel subconsciente y solo 5% al nivel consciente, es que desde el lado de los negocios el principal desafío responde a la necesidad de lograr conocer lo que realmente quiere el cliente. Con esto en mente, si ponemos en marcha el conocimiento del subconsciente, en donde se comprenden como se toman las decisiones y se percibe el valor, podremos proponer y testear una propuesta de valor o un MVP, que encaje con las expectativas subconscientes del cliente. Pero sobretodo conocer realmente cual es su percepción de está, del uso, del valor, de la emoción en sus mensajes, etc.
Bajo esta perspectiva, para aplicar la neuroestrategia en el negocio, se aplican cuatro pasos:
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Entender el reto de negocio
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Medir micro-expresiones faciales sobre stimuli ad hoc
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Modelizar el subconsciente con IA
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Diseñar una MVP diferencial
La neuroestrategia en sí, se apoya en diversas técnicas y herramientas, como la neuroimagen, la neurofisiología y la psicología cognitiva, para estudiar cómo los procesos mentales, las emociones y los mecanismos cerebrales influyen en la planificación, implementación y evaluación de estrategias. Con el objetivo de comprender cómo se procesa la información, cómo se toman las decisiones, cómo se manejan los riesgos y cómo se generan las respuestas estratégicas en el cerebro.
El rango del negocio
La aplicación de la neuroestrategia puede tener diferentes objetivos. Por ejemplo, puede utilizarse para identificar patrones cerebrales asociados con el pensamiento estratégico efectivo, lo que permitiría identificar y desarrollar habilidades estratégicas en individuos y equipos. También puede ayudar a comprender los sesgos cognitivos y emocionales que pueden afectar la toma de decisiones estratégicas y encontrar formas de mitigar su impacto.
Mediante la neurociencia, se puede abordar un amplio rango de retos de negocio.
Diseñar nuevas Propuestas de Valor:
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Mejora del modelo de negocio
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Definición de productos y servicios
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Mejora de la experiencia de cliente
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Reinvención de canales (internos y externos)
Investigar y diagnosticar:
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Diagnóstico de herramientas y apps
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Estudios e investigaciones de clientes
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Desarrollo de productos y servicios
Gestionar el talento:
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Cambios culturales
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Medición científica de competencias y valores
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Solución para la gestión óptima del talento
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Recruiting remoto
La nueva visión de la gestión del talento
La gestión del talento requiere analizar el encaje entre el candidato a una vacante y las necesidades de la organización. Desde Minsait, una compañía de Indra, se ha desarrollado una solución basada en neurociencia e IA para evaluar con pleno rigor científico el encaje entre empresa y candidato, el cual comprende de tres pasos:
1.- Evaluación
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Experiencia agradable y no invasiva
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Ejecución y operación en remoto
2.- Modelización
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Incorporación de neurociencia e IA
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Procesado masivo en casi real time
3.- Dashboard de resultados
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Totalmente flexible y personalizable
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Segura, compliant y adaptable
De esta manera, evaluando competencias, habilidades y valores, obtendremos diversos beneficios como mayor rigor y precisión en la toma de decisiones, además de sostener una eficiencia operativa basada en la agilidad y flexibilidad en las gestiones realizadas.
Estos aspectos pueden aplicarse en diversos procesos dentro de una organización, los cuales pueden ir desde el recruiting remoto, evaluación del desempeño, management audit, gestión de reubicaciones, promociones internas, formación y planes de carrera, y auto-conocimiento del empleado.
En resumen, la neuroestrategia es un enfoque emergente que utiliza los conocimientos y herramientas de la neurociencia para comprender y mejorar los procesos estratégicos. Al combinar los campos de la neurociencia y la estrategia, se busca obtener una comprensión más profunda de cómo el cerebro influye en la toma de decisiones estratégicas y cómo se pueden aplicar estos conocimientos para mejorar la formulación y ejecución de estrategias en diversos ámbitos.
Equipo Prensa Portal Red Salud
