CHILE TIENE MIEDO: PABLO FUENZALIDA, EXPERTO EN TRANSFORMACIÓN HUMANA Y GESTIÓN DE EMOCIONES, ENTREGA RECOMENDACIONES PARA SALIR DEL ESTADO DE ALERTA Y RECUPERAR LA CALMA INTERIOR
En un país tensionado por la inseguridad, la incertidumbre y la sobrecarga emocional, Pablo Fuenzalida —fundador de Dinámicas Humanas y DhumanLab, profesor de liderazgo y coaching en la Universidad Adolfo Ibáñez, y referente en transformación humana— entrega claves prácticas desde la neurociencia, el cuerpo y la conciencia para transitar el miedo sin quedar atrapados en él. Con más de 23 años de experiencia, el experto enfatiza la importancia de lo que denomina ecología emocional atencional: no solo importa lo que sentimos, sino también dónde elegimos poner nuestra atención. En un entorno marcado por el miedo, se vuelve urgente volver a hablar —y hablarse— desde lo que calma, lo que da sostén, aunque sea simple, cotidiano o pequeño.
Chile atraviesa no solo una crisis económica o política, sino una crisis emocional importante. La última encuesta Data Influye revela que más del 56% de la población considera justificado el alto nivel de temor social, y un 30% declara vivir con miedo de forma frecuente. La sensación de inseguridad, la sobreexposición a noticias negativas y el desgaste emocional han instalado un estado de alerta permanente en la vida cotidiana de las personas.
Desde esta mirada, Pablo Fuenzalida propone una mirada distinta para salir de este estado de tensión y recuperar la calma interior. Fundador de Dinámicas Humanas y DhumanLab, con más de 23 años de trayectoria profesional, profesor de liderazgo y coaching en la Universidad Adolfo Ibáñez, ha acompañado a más de 7.000 personas y liderado más de 100 procesos transformacionales en organizaciones públicas y privadas. Su especialidad: facilitar la transición del miedo al coraje en personas y equipos que enfrentan entornos de alta presión, incertidumbre o crisis.
A través de una metodología que integra neurociencia, y transformación humana, su propuesta con respecto a las emociones de temor e inseguridad, parte de la base de que “no se trata de negar lo que está pasando en el país, sino de desarrollar herramientas internas para no vivir atrapados en el miedo. Chile necesita volver a hablarse amable, a escucharse con respeto, a recuperar el coraje de vivir sin estar en guerra por dentro”, afirma.
En ese marco, el experto explica que esto se debe a que “el cuerpo entra en modo sobrevivencia. Vivimos con la amígdala cerebral sobreexcitada, generando cortisol de forma crónica. Eso desregula nuestras emociones, debilita la salud y distorsiona nuestra capacidad de decidir”. Además, pone el foco en lo que llama “ecología emocional atencional”: no solo importa lo que sentimos, sino también a qué elegimos prestarle atención. “Si solo hablamos de lo que amenaza, ampliamos el miedo. Necesitamos volver a hablar de lo que sostiene, de lo que calma, de lo que funciona, aunque sea pequeño”.
En ese camino, entrega tres recomendaciones clave para recuperar la estabilidad emocional:
- Regula tu cuerpo, calma tu mente: El miedo es una emoción que afecta tu fisiología. Técnicas como la meditación, la respiración consciente y duchas frías breves, entrenan el cuerpo para actuar en calma en momentos de estrés. El ejercicio, el llanto y la risa, entre otras permiten liberar la carga emocional acumulada. “Si no descargamos el miedo constantemente, se transforma en ansiedad crónica o depresión”, afirma.
- Fortalece tus vínculos cercanos: La red emocional inmediata —familia, amistades, comunidad— es el mayor antídoto contra el miedo. “Donde hay vínculo, hay seguridad emocional. No se trata de hablar de grandes cambios, sino de gestos cotidianos que nos recuerdan que no estamos solos”.
- Cuida tu atención, no todo es amenaza: El experto advierte sobre el efecto del lenguaje y las conversaciones en el estado emocional colectivo. “Si solo hablamos del miedo, lo amplificamos. Tenemos que volver a hablar también de lo que funciona, de lo que nos hace bien”.
Más información @pablofuenzalida.oficial y en su LinkedIn Pablo Andrés Fuenzalida