Comisión Nacional de Tenencia Responsable de Mascotas recordó que si bien Chile ha logrado erradicar la rabia transmitida por perros y gatos, la amenaza persiste principalmente por los casos detectados en murciélagos
En el marco del Día Mundial contra la Rabia, la Comisión Nacional de Tenencia Responsable de Mascotas del Colegio Médico Veterinario de Chile (Colmevet), a través de su equipo directivo liderado por Viviana Valenzuela, Rodrigo Morales y Ana Francisca Soto, hicieron un llamado a fortalecer los roles del Estado, tutores y médicos (as) veterinarios (as). Esto considerando que, si bien Chile ha logrado erradicar la rabia transmitida por perros y gatos en la última década, la amenaza persiste, principalmente por los casos detectados en murciélagos y los procesos migratorios en la frontera.
“Como Colegio Médico Veterinario tenemos la convicción que este tema debe tratarse de forma integral. Reforzar las políticas públicas y sanitarias, considerando también los efectos migratorios sobre la entrada de animales. Los tutores deben cumplir con los deberes que les asigna la Ley para proteger la salud y promover una convivencia responsable de mascotas y personas”, sostuvieron.
En este contexto, la prevención es la clave. El Reglamento de Prevención y Control de la Rabia establece que la vacunación es obligatoria para todos los perros y gatos. Sin embargo, persisten desafíos importantes como el alto número de mordeduras, que según cifras del Ministerio de Salud, superan las 60.000 atenciones de urgencia anualmente. Estos números demuestran la necesidad de reforzar la tenencia responsable y las políticas de salud pública.
Como Colmevet insisten en que el control de esta enfermedad zoonótica requiere un esfuerzo conjunto. «Debemos fortalecer la vigilancia epidemiológica, asegurar el acceso oportuno a las vacunas e integrar en las políticas públicas el enfoque ‘Una Salud’, enfoque que integra la salud de las personas, los animales y el medio ambiente para una gestión más eficaz de las zoonosis”, indicaron.
Así, la responsabilidad recae en múltiples actores. El Estado debe garantizar la disponibilidad de vacunas, los tutores deben cumplir con su deber de vacunar a sus mascotas, y los médicos (as) veterinarios (as) deben continuar con su rol de educadores y vigilantes sanitarios. Solo así se podrá mantener a raya esta enfermedad y promover una convivencia segura para todos.